Graviola Para el Cáncer de Mama

Querida lectora.
Si estás aquí probablemente te hayas encontrado un bulto en el pecho que antes no estaba ahí, o puede que a alguien de tu entorno o incluso a tí, le acaben de diagnosticar cáncer de mama. Tranquila, ¿lo primero?

Respira.
Vamos a ver brevemente lo que debes saber y, sobre todo, no pierdas de vista que el cáncer de mama es uno de los que tienen mayor índice de curación. Vamos allá ¡no estás sola!

¿Cura la Graviola el Cáncer de Mama ?

Actualmente se está demostrando en numerosos estudios que la Graviola resulta ser un complemento extremadamente eficaz aplicado junto al tratamiento habitual para la lucha contra el cáncer de mama. Las numerosas propiedades de la Guanábana, entre las que se encuentran la capacidad de comerse las células cancerígenas, ayudan de manera significativa a la disminución e incluso desaparición de tumores. Te recomendamos el extracto de graviola ozonizada «Graviola Prozono»

Te dejamos los estudios a continuación

¿Qué debo saber sobre el Cáncer de Mama?

Prevención

No existe ningún método que evite al 100% la aparición del cáncer de mama. Sin embargo, se ha demostrado que llevar un estilo de vida saludable realizando ejercicio físico al menos 4 horas a la semana y una alimentación equilibrada reduce el riesgo de padecerlo.

Por otro lado, si en tu familia han aparecido más de 2 casos entre parientes cercanos debes comentarlo al médico para que te realice una prueba genética que determinará si tienes más posibilidades de lo “habitual” de sufrir esta enfermedad, debido a una mutación genética.

Causas

Hablar de causas del cáncer de mama es complicado.

La causa más establecida es la genética. Por ello es muy importante que comentes con tu médico si en tu familia se han dado más de 2 casos, como comentábamos antes.

En cuanto al resto de posibles causas, llevar una vida sin ejercicio físico y con una alimentación alta en grasas y azúcares también está demostrado ser un factor de riesgo.

Síntomas

El más evidente, encontrar un bulto en la zona del pecho o axila. Por esto realizar autoexploraciones una vez al mes es muy importante.

Además encontramos otros síntomas, como son:

  • Hinchazón, zonas rojas o dolor persistente en la zona del pecho.
  • Cambios en el tamaño del pecho
  • Secreción del pezón
  • Cambios externos en el pezón como son úlceras, costras o escamas en esta zona.
  • Hoyuelos o arrugas en la piel

Tipos

Los tipos de cáncer de mama se establecen teniendo en cuenta dónde se originan y el grado de invasión:

  • Carcinoma Ductal In Situ:

    Es el menos agresivo ya que se origina en las paredes de los conductos mamarios; de forma muy localizada, fácilmente extirpable y no provoca metástasis. La tasa de curación es de casi un 100%.

  • Carcinoma Ductal Infiltrante o Invasivo:

    Es el más común. Se origina también en los conductos mamarios, pero se infiltra en el resto del tejido de la mama y puede extenderse.

  • Carcinoma Lobulillar In Situ:

    No es un cáncer propiamente dicho, sino un marcador de riesgo. Las personas con este tipo presentan un riesgo elevado de desarrollar la enfermedad. Al detectarse, la paciente debe realizarse controles anuales para detectar de forma precoz un posible desarrollo del cáncer de mama.

  • Carcinoma Lobulillar Infiltrante o Invasivo:

    Este tipo de cáncer, aparece en los acinos mamarios, que es donde se produce la leche de la lactancia. Puede extenderse al resto de tejidos del cuerpo.

  • Carcinoma Inflamatorio:

    Este tipo es bastante agresivo y de rápido crecimiento. Presenta síntomas bastante evidentes como el enrojecimiento de la piel y el aumento de la temperatura; además de arrugar la piel y hacer aparecer protuberancias. Por suerte, es un cáncer muy poco común con un 1% de aparición.

Diagnósticos

Existen varios métodos para el diagnóstico. Tu especialista decidirá cuál es el adecuado en cada caso. Los principales son:

  • Mamografía
  • Ecografía
  • MRI

Son pruebas no invasivas, que se centran en descubrir si existe algún tipo de bulto y si su aspecto puede ser sospechoso de ser maligno o no.

Biopsia

Aunque existen varios tipos, podemos hablar básicamentevde una prueba invasiva, ya que trata de coger una muestra del tejido sospechoso y analizarlo para comprobar, de manera definitiva, si es cancerígeno o no.

Tratamiento

Este punto es difícil de establecer, puesto que la ciencia, por suerte, continúa haciendo avances para mejorar los tipos de tratamientos. Los más comunes son:

  • Intervención quirúrgica

    • Se interviene el seno afectado para extirpar el bulto. Puede suceder que, al abrir el pecho, se vean más zonas afectadas y el tratamiento más seguro, sea la extirpación del seno completo.
  • Radioterapia

    • En líneas generales, este tipo de terapia consiste en someter al seno afectado a radiaciones de todo tipo de rayos X para eliminar posibles células cancerígenas que el cirujano no haya podido ver. Se suele someter a las pacientes a radiaciones diarias durante unas 5 semanas.
    • Sus principales efectos son el enrojecimiento de la piel.
  • Quimioterapia

    • Es un tratamiento que se administra o vía oral, vía intramuscular con inyecciones o vía intravenosa. Tiene como objetivo el mismo que la radioterapia, matar las células cancerígenas.
    • Sus principales efectos secundarios son la pérdida del cabello, náuseas y pérdida de apetito.
  • Otros tratamientos

    • Existen otros tratamientos como los hormonales, cuyo objetivo (en grandes rasgos) suele ser el control del estrógeno, que es una hormona que el tumor necesita para reproducirse.
    • Existen también otros tratamientos como la terapia dirigida; esta se caracteriza por administrar al paciente un tratamiento que está “educado” para atacar las células cancerígenas.