Estudios sobre la Graviola y sus efectos contra el cáncer

De un tiempo a esta parte la Annona muricata, ha sido objeto de numerosos estudios relacionados con el cáncer. Se ha venido observando que, este árbol portador de muchos elementos saludables, tiene también una incidencia positiva en el tratamiento de los distintos tipos de cánceres ayudando, junto con el tratamiento habitual, a la disminución e incluso desaparición de los tumores.

El doctor Jerry L. MacLaughlin fue el primer profesional en señalar que la guanaba (como también se la conoce) poseía un componente que era potencialmente anticancerígeno. Este doctor, que trabaja para la Universidad Pardue de Farmacología (Indiana, Estados Unidos), ha dedicado los últimos 28 años de su carrera en investigar moléculas anticancerígenas en plantas, encontrándose de esta manera con las propiedades de esta palnta. Descubrió que la acetogenina (un componente de dicho árbol) es un potente anticancerígeno.

Habiendo puesto éste el foco de la comunidad de investigadores sobre este árbol, el descubrimiento corrió como la pólvora entre otras universidades y centros de estudio.

Son más de 20 los laboratorios de primer nivel que se encuentran investigando la incidencia de la Guanábana y sus componentes sobre el comportamiento del cáncer, debido a que los resultados están resultando ser sorprendentemente alentadores.

Si quieres conocer más sobre los estudios, en el artículo de cada tipología de cáncer te hemos puesto el link a cada uno, pero como sabemos que a veces estos son de lectura cuanto menos difícil, te vamos a relatar un resumen de quién está investigando. De esta manera podrás valorar que los estudios tienen una base seria y que, en este caso a diferencia de otros remedios de tipo milagroso, “cuando el río suena, agua lleva”.

Muchas son las instituciones que tienen a esta planta medicinal entre sus elementos de estudio. Esto es ya una garantía de que algo bueno esconde este árbol de origen exótico. Una de las más conocidas es el Instituto Nacional del Cáncer.

Como ya sabrás esta institución tiene como objetivo la lucha contra esta epidemia mediante el estudio y la experimentación.

El hecho de que una institución con semejante prestigio y que fue fundada el año 1937 (siendo un referente en la lucha contra el cáncer desde entonces) esté investigando la incidencia de la misma en el desarrollo del cáncer te hará tener una idea de lo positivos que los estudios están resultando ser.

Se está viendo que dicho árbol actúa como un “come-tumores”, resultando un complemento perfecto e inocuo (al ser de origen natural) a los tratamientos comunes.

Por otro lado, la Universidad Purdue, en Estados Unidos y la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Católica de Corea del Sur también están estudiando la reacción de la Graviola aplicada como tratamiento para eliminar el cáncer.

Los resultados están demostrando la capacidad anticancerígena de este árbol, además de hablar de la inexistencia de incompatibilidad de su aplicación con otros tratamientos. Lo que nos da una idea de lo importante de los estudios; esta planta puede ser un complemento a la quimioterapia, radioterapia o cualquiera que sea el tratamiento recetado por el oncólogo, sin interferir en sus efectos y actuando como complemento más que positivo para luchar contra esta epidemia del siglo XXI.

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Estudios sobre las propiedades anticancerígenas de la Graviola